Mamá come sano: entrevista a Julio Basulto

Hoy os traemos un tema vital: la alimentación, y más en concreto, la alimentación de las mujeres embaradazas o que están intentando quedarse embarazadas. Un campo lleno de minas y engaños aprovechándose de los miedos e inseguridades de las madres, de los mitos y de poco sentido crítico.
Sentido crítico, y mucho, ante todo el negocio que nos rodea es el que nos trae Julio Basulto, dietista-nutricionista, autor de Secretos de la gente sana, Se me hace bola, Comer y Correr y este último Mamá come sano por el que le traemos a Madresfera.
Julio es ponente en jornadas científicas y congresos relacionados con la nutrición humana como el pasado Fedalma en Valencia, y es revisor en revistas científicas indexadas y en varias guías de la Organización Mundial de la Salud.
Le hemos abordado con nuestras preguntas sobre este interesantísimo libro porque, realmente, lo que nos cuenta en él, podemos aplicarlo también a toda la familia, y sobre todo nos apetecía mucho hacerle las siguientes cuestiones:
M- Por qué este libro? Te han preguntado muchas veces cuál es la dieta idónea para una embaradaza?? Cuéntanos un poco por qué surge esta preocupación sobre las embarazadas y su alimentación.
J-Sí me han preguntado muchas veces sobre la alimentación en el embarazo y en la lactancia, pero el motivo fundamental que me ha llevado a escribir el libro es dotar de herramientas a la población para que sepamos dilucidar cuándo estamos frente a un consejo que tiene sentido, o cuándo tenemos delante a uno de los muchos engaños dietético-nutricionales que nos rodean.
 
Algunos de los citados engaños provienen de charlatanes sin escrúpulos, otros de periodistas mal informados, otros de intereses comerciales y, los más peligrosos, de profesionales sanitarios poco o nada actualizados. 
 
En cuanto a por qué surge la preocupación en embarazadas o lactantes sobre su alimentación, pues supongo que todo lo anterior conspira para que se sobrepreocupen. Aunque, curiosamente, los estudios señalan que la alimentación en el embarazo no es que sea precisamente muy saludable, como detallo en el libro.
M- Sin destripar el libro, ¿cuál crees que es uno de los peores hábitos de las embarazadas en cuanto a su alimentación?
 
J- Sin duda, el consumo de alcohol. Casi cuatro de cada diez embarazadas toma alcohol en esta delicada etapa de la vida, algo la mar de peligroso. Sobre todo si sabemos, como indica MedlinePlus, el portal de salud de referencia en Estados Unidos, que “Una mujer embarazada que consuma cualquier cantidad de alcohol está en riesgo de tener un niño con síndrome de alcoholismo fetal. No se ha establecido ningún nivel de “seguridad” con el consumo de esta bebida durante el embarazo”.
M- Lo que nos ha llamado más la atención de tu libro es lo bombardeados que nos encontramos en general de informaciones contradictorias que nos ponen la cabeza como un bombo (ejemplo, el vino o el jamón serrano) y que eso se traduce en que no tenemos ni idea de lo que es bueno realmente o no, ¿no crees? ¿Cuántos estudios nos han dicho que un vaso de vino al día es bueno? Y ahora vienes tú y nos dices que no!! Y ¿el jamón serrano? ¿No es una tarea imposible saber realmente qué es bueno y qué no? ¿No estamos a merced del marketing y de los intereses comerciales? ¿Cómo y dónde informarnos con objetividad?
J- Pues tienes razón: salvo en el caso de los libros que mencionas (y unos pocos más) estamos bombardeados de informaciones contradictorias. Por tierra, mar y aire. De hecho, en ocasiones me da por pensar aquello de “a río revuelto, ganancia de pescadores”, es decir, la industria alimentaria o los vendedores de milagros son los primeros interesados en que la población piense aquello de “los nutricionistas dicen cada día una cosa distinta, por lo tanto, todo vale”.
 
Pero lo cierto es que en los últimos 20 años hay un mensaje que no ha cambiado por parte de las entidades de referencia en nutrición humana y dietética: basa tu dieta en alimentos de origen vegetal poco procesados, y que el resto de alimentos (y eso no incluye los productos superfluos), estén en menor cantidad.
 
En cuanto al vino, tampoco ha cambiado en absoluto el mensaje que emitió en 1996 la Organización Mundial de la Salud (OMS): “Cuanto menos alcohol, mejor”. 
 
M- Precisamente en este momento en el que estamos obsesionados por la imagen, por estar en forma, por tener un cuerpo 10, es cuando peor nos alimentamos y más obesidad hay. En tu opinión, ¿qué está fallando?
 
J- Hay muchas cosas que fallan. Para empezar, la obsesión por la imagen no proviene tanto de la población sino, de nuevo, de intereses comerciales. Tenemos, por una parte, a miles de falsos gurús que nos hablan de una entelequia llamada “peso ideal” . Entelequia que critiqué en este texto, del que estoy bastante orgulloso: http://www.consumer.es/web/es/alimentacion/aprender_a_comer_bien/alimentos_a_debate/2013/02/13/215795.php. 
También nos rodean, por otra parte, los pesadísimos medios de comunicación, que nos venden una imagen nada real de en qué consiste un cuerpo “normal”. Sumémosle la muy poderosa industria de la “belleza”, y de las píldoras adelgazantes, sean alternativas (Ej.: extracto de glucomanano) o bien provenientes de casas farmacéuticas. Todo lo anterior no hace sino aumentar nuestra insatisfacción corporal.
 
Pero falla también algo importante: buena parte de la información que recibimos sobre qué es una dieta sana ha sido elaborada, o revisada con lupa, por la industria alimentaria. Ya puedes imaginarte el resultado. Sugiero pegar una ojeada a este texto que escribí en el blog “Ser Consumidor”, titulado “Gobierno e industria de alimentos y bebidas. Amistades peligrosas” (http://cadenaser.com/programa/2014/04/10/ser_consumidor/1397128533_005495.html) 
 
M- ¿Cuál consideras que es principal desafío de los nutricionistas ahora mismo?
 
J- Acceder a la Sanidad Pública, para que los ciudadanos tengan acceso gratuito a los servicios de un colectivo que, hoy por hoy, está siendo ninguneado en muchísimos ámbitos sanitarios en los que el peso de la alimentación es decisivo.
 
M- ¿Qué pasa con el aguacate? ¿Es uno de los superalimentos de los que tanto empieza a hablarse? Hay realmente superalimentos que nunca deben faltar en nuestras neveras?
 
J- Con el aguacate pasa que mucha gente evita tomarlo porque piensa que nos hará subir el colesterol, o nos hará engordar, cuando ni una cosa ni la otra. ¿Es difícil sustituir un bocadillo de embutido por uno de aguacates y almendras? Es posible. De hecho, en realidad no es que recomiende a nadie que se haga un bocata de aguacate y frutos secos, tan solo lo cité como un ejemplo de lo que yo mismo desayuno de vez en cuando. La cuestión es que en la cocina no debemos pensar que todo está inventado, ni que no es posible realizar otras combinaciones que a la vez que sean tanto deliciosas como saludables. 
 
¿Existen los superalimentos? En mi humilde opinión, solo existe uno: la leche materna. Pero incluso así debemos preguntarnos si debemos hablar de los beneficios de amamantar, o más bien de los riesgos de alimentar a nuestros bebés con leches artificiales (que los hay). En 2006 un texto refrendado por la Comisión Europea y la OMS no incluyó los beneficios del amamantamiento por la siguiente razón «Porque el amamantamiento es la manera natural (y específica de la especie) para alimentar a las crías humanas y, por lo tanto, no se requieren pruebas que lo apoyen». Muy de acuerdo.
Muchísimas gracias por tus respuestas, Julio, y por este libro en el que tratas a los lectores como seres inteligentes, a diferencia de muchos medios y empresas del sector. Es muy necesario que desarrollemos nuestro sentido crítico ante lo que nos ofrecen, y nos venden, como “comida sana”. Por nuestro bien y el de nuestros hijos!
No dejéis de leer a Julio Basulto en sus redes y blogs donde colabora porque sin duda os hará cambiar vuestra forma de ver la alimentación. Y para seguir informándonos sobre el tema nutrición os recomandamos seguir también a Juan Revenga, que acaba de lanzar su último libro Adelgázame, miénteme y que nos parece una lectura casi obligatoria para seguir desarrollando ese sentido crítico que tanto nos falta ante las dietas y la obsesión por adelgazar.
¡Un abrazo y a leer mucho!

Autor entrada: Mónica

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